martes, 26 de febrero de 2008

Plan Nacional de Desarrollo





Crear una nación, es todo un proceso, guíar un proyecto es toda una asaña, pero dirigir un país que sea próspero, no es una tarea nada fácil, es todo un esfuerzo descomunal, y un acto de miles de personas, un objetivo en común, una razón de subsistencia cultural aunque esta nos haga voltear la mirada y nos muestre nuestro propio lado anarquíco de la situación y nos deprima en un contundente estado letárgico, autosuicida depresivo que nos hace ver lo feo de la situación y no como mejorarla.

Para dirigir los más insulsos de los proyectos, e incluso el de vida se require un desarrollo sosteniable, no hay espacio para titubeos, ni siquiera para agarrar confianza no se piensa en ello no sólo se hace, se planea, se dirige.

Es por esto, que para dirigir una gran nación, se requiere un gran poder de dirección, más allá de los cuentos demagogos, es un golpe personal, ¿un sólo hombre puede crear un cambio tan radical?, -Cambio tanto él que el día de su muerte se contó el primer día de la humanidad

No es un problema de los demás sino propio un lugar donde encontrar un lugar mejor para vivir.


No importando tú país. raza, credo, estatus social ni sexual sólo planea y actua que aunque no lo sepas miles de personas podrían estar dependiendo de tí, de tú unica acción -Cambiar por ti mismo.






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